miércoles, 27 de diciembre de 2006

La locura del alma desbaratada

Haré un comentario de Chesterton, escritor. Decía que ‘loco’es quien lo ha perdido todo, menos la razón. Que loco es quien ha desbaratado su alma y solo conserva la felicidad instrumental de su espíritu. Savater, filósofo, dice que la preocupación social de hoy por psijé es clínica o burocrática. Que importa lo psico-analítico, lo psiqui-átrico, lo psico-social, lo psico-lógico, lo psico-técnico…, pero que lo psíquico en cuanto tal (‘el alma pura’) no preocupa en cuanto se desvía de lo morboso o de lo criminal. María Zambrano, filósofa, escribió:’ Gran tranquilidad ha proporcionado a gran parte de la psicología y otras ciencias humanas o del espíritu el prescindir de esto, que se nos da a sentir como ésta, llamada tradicionalmente alma… ¿Es posible someter tranquilamente al análisis el alma, el alma misma?...Esa alma tan ligada a sentidos y sentimientos no es algo que tenemos, sino algo que nos pasa…El que despierta con ella…, deja la guarida del sueño y del no-ser: ser y vida unidamente se orientan hacia allí donde el alma les lleva. Renace. Y así el que se despierta con su alma nada teme. Y cuando ella sale dejándole en abandono conoce, si no se espanta, algo, algo de la vocación extática del alma. Ese vuelo al que ningún análisis científico puede dar alcance’ (Claros del bosque).

‘Estar loco’ no se puede certificar por alguien que no sea uno mismo. Necesitas haberlo perdido ‘todo’ (haber desbaratado tu alma) para estarlo y autocertificarlo. Si te despiertas con ella extasiada y escribes en este blog no estás ‘loco’. No hay ciencia que pueda analizar el alma. La mía no está desbaratada. Debajo de mi bipolaridad humoral yace un alma no susceptible de diagnósticos y de terapias extrínsecas.

Carlos Sarod